Abstract:
Este
artículo
analiza
uno
de
los
últimos
episodios
de
las
tensas
relaciones
políticas
entre
el
gobierno
de
Rafael
Correa
y
las
nacionalidades
y
pueblos
indígenas
del
Ecuador:
la
orden
de
desalojo
de
la
sede
histórica
y
política
de
la
CONAIE.
El
análisis
pone
en
perspectiva
histórica
los
conflictos
de
coyuntura
entre
el
estado
y
los
pueblos
indígenas
y
explica
por
qué
el
gobierno,
que
se
define
como
de
izquierda,
quiere
debilitar
y
destruir
a
uno
de
los
actores
políticos
e
históricos
más
fuertes
y
organizados
de
los
movimientos
sociales
del
país
y
de
Abya--Yala.